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Los tiempos cambian. Y las auditorías de certificación también. El papeleo, algo tan de moda en los sistemas de gestión de hace algunos años, hoy en día se considera molesto e ineficaz. SPG Certificación se ha adaptado a esta tendencia y anima a las empresas a centrarse en aquellas actividades que aportan valor al cliente. De esta manera, se puede conseguir el propósito final: la satisfacción del cliente de la empresa certificada

Las auditorías de normas ISO ya no son burocráticas.

Tradicionalmente, la certificación en normas ISO, se ha relacionado con la creación de procedimientos por escrito y la preparación de muchos documentos burocráticos. «Si no está procedimentado, no cuenta», se decía. Pero, ¿de qué sirven todos esos documentos, si no aportan valor a la empresa?

SPG Certificación, una entidad certificadora de normas ISO, acreditada para la certificación de sistemas de gestión de calidad (ISO 9001) y medio ambiente (ISO 14001), se ha especializado en la realización de auditorías sin burocracia. Y así lo indica su eslogan: Auditorías sin papeleo para estimular resultados. Y es que papeleo y calidad, no son, habitualmente, sinónimos. Valor, en cambio, sí se podría considerar un sinónimo de calidad. Y en esto se centran las auditorías de SPG Certificación: en aportar valor a la empresa que audita.

Los sistemas de gestión de calidad son una herramienta –voluntaria- que ayuda al buen funcionamiento de la empresa. Esto es, que aportan valor a la organización mediante un sistema que incentiva la buena gestión de los procesos y actividades de la organización. Para ello, se siguen las guías de la norma ISO 9001, la cual tiene como último fin la garantía de satisfacción del cliente final de la empresa u organización.

¿Por qué las empresas se certifican en ISO 9001?
A una empresa, la implementación y certificación de la norma ISO 9001 le resulta en grandes beneficios, principalmente dentro de estos tres campos:

– Beneficios estructurales que se convertirán en beneficios económicos. Una mejora en la gestión de los tiempos y los costes de la empresa, ayudará a incrementar la productividad de los trabajadores y equipos.

– Potencia la participación de la alta dirección de la empresa. Un sistema de gestión de calidad debe abarcar toda la pirámide empresarial, desde los altos cargos hasta los más bajos.

– Se genera confianza hacia el cliente. El certificado ISO 9001 garantiza a los clientes que la empresa u organización realiza sus procesos y actividades siguiendo las pautas marcadas por los estándares de calidad; por lo tanto, pueden esperar resultados de calidad por parte de su proveedor.

El certificado ISO 9001, a través de su evolución a lo largo de los años, ha estado siempre enfocado al cliente. También motiva a todos los trabajadores de la empresa certificada e impacta sobre la dirección, consiguiendo un aprendizaje y mejora continuos.

Esto explica por qué los clientes o administraciones públicos favorecen proveedores que tengan el sello ISO 9001 e ISO 14001. Estos sellos otorgados tras una auditoria “no burocrática” de SPG Certificación, aseguran que las empresas certificadas tienen un sistema eficaz para lograr las expectativas y necesidades de sus clientes.

Para los que les interesa probar las auditorías sin burocracia, desde el siguiente enlace desde podrás contactar con SPG Certificación: https://spg.certificadoiso9001.com/sin-papeleo

Fuente Comunicae