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Casi dos años de retraso injustificado de Transportes para aplicar la Directiva Europea de Teleformación supone un agravio para la conciliación familiar y daña la calidad de vida de los conductores profesionales y transportistas

En el pasado mes de abril de 2021 se publicó, con un año de retraso en el cumplimiento de los plazos máximos, el RD que transpone la Directiva Europea del año 2018 que regula la formación CAP de los conductores profesionales.

El nuevo RD debía contemplar la teleformación como complemento a la formación presencial, pero la realidad es que en su articulado condiciona su implementación a la conformidad con las especificaciones que deben establecerse reglamentariamente por parte del Ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, en relación a la formación CAP Inicial, y a un futuro desarrollo normativo mediante la publicación de una OM que regulará la formación CAP Continua.

Han transcurrido casi dos años desde la fecha en que tendría que haberse publicado el nuevo RD CAP y, a día de hoy, el Ministerio de Transportes sigue sin desarrollar la normativa que permita la teleformación en los cursos CAP. Esta demora injustificada está causando un grave perjuicio al sector del transporte, que está viviendo sus peores momentos por la falta de personal para llevar camiones o autobuses. Además, el perjuicio también afecta a los conductores y las conductoras profesionales, pues el retraso en poder cursar el CAP en modalidad de teleformación les afecta en su vida personal, familiar, social y profesional.

AT Academia del Transportista resume los beneficios que para los conductores tiene el aprendizaje a través de aula virtual y que, hasta ahora, les niega Transportes:

  1. España Vaciada: mayores facilidades de acceso a la formación en las zonas despobladas donde no existen centros o están muy alejados.
  2. Conciliación familiar: las formaciones suelen realizarse en fin de semana o tiempos de descanso de los transportistas dificultando la convivencia familiar.
  3. Brecha Digital: se suben al tren europeo de las competencias digitales en momentos de tendencias en los que la documentación del transporte será electrónica.
  4. Innovación: facilidad de incorporación de metodologías innovadoras virtuales atractivas.
  5. Aprendizaje activo: interacción y retroalimentación de lo aprendido.
  6. Recursos virtuales ilimitados: posibilidad infinita de incorporar activos digitales.
  7. Flexibilidad horaria, de lugar y de tiempo: de libre elección por parte del transportista en función de su disponibilidad, etc.
  8. Ahorro: en gastos de desplazamiento y en tiempos de trayecto.
  9. Barreras de acceso a la profesión: facilidad de acceso a la formación CAP y por tanto al desempeño profesional.
  10. Expectativas y necesidades: los conductores apoyan en más de un 90% la modalidad de teleformación frente a la presencial

Luis Miguel Soto, CEO de AT Academia del Transportista, incide en que «los conductores son la parte esencial de la cadena del transporte, que la mejora de su formación gracias a las ventajas del e-Learning es clave para el avance en los procesos de digitalización e innovación de sus empresas y que el aumento de profesionales cualificados permitirá cubrir la necesidad urgente de estos conductores».

Para Soto, «este retraso reiterativo en el cambio de paradigma de la formación de conductores supone una traba sinsentido que no tiene más explicación que la falta de empatía con las personas que desempeñan o quieren desempeñar esta profesión. Cuesta creer que por un lado la Agenda Digital y todas las estrategias educativas potencien las metodologías e-Learning y que el Mitma, por otro lado, siga dilatando su implementación sin argumentos que legitimen su dilación legislativa».

Insiste Luis Miguel Soto en que «la teleformación, entre otras ventajas, facilitará que los conductores profesionales pasen más tiempo con su familia. Precisamente, esta falta de conciliación familiar es una de las principales causas que le restan atractivo a esta bonita profesión. Mejorar la calidad de vida de los trabajadores se considera además como una herramienta importante para mejorar la competitividad de las empresas. La diferencia entre realizar un CAP Continua de 35 h de duración, que suele impartirse en jornadas de 7 u 8 horas durante los fines de semana, a implementarse en modalidad de teleformación con las 12 horas dictadas por la Directiva Europea, supondría que el conductor invirtiese un solo fin de semana presencial en superar el curso, quedando el resto de los fines de semana a su libre disposición».

‘Siguen faltando conductores, pero Transportes no derriba las barreras para su formación’.

Fuente Comunicae