Hoy conocemos la historia de Cristy, franquiciada de Duldi.

Después de la celebración de su 5º aniversario con Duldi, hemos podido hablar con la franquiciada de Duldi Sanlúcar, que nos cuenta cómo ha vivido estos 5 años formando parte de la familia Duldi.

Para quien no te conozca… ¿quién eres y de donde venías antes de unirte como franquiciada a Duldi?

C: Soy Cristy  y venía de una muy mala experiencia en el terreno laboral, ya que me despidieron de mi trabajo después de 12 años trabajando en Mercadona, estando de media jornada por maternidad de mi niño. Un golpe muy duro verte con 30 años sin trabajo, con un hijo y sin nada.

¿Cómo has vivido estos primeros 5 años de la franquicia Duldi Sanlúcar?

C: Quiero destacar, antes de empezar con mi franquicia Duldi, el hecho que se me esperara los larguísimos 4 meses hasta celebrar mi juicio por despido improcedente, sino hubiese sido imposible empezar. Montse Cubedo, la directora comercial, fue una ayuda incondicional para poder llevar a cabo nuestra ilusión.

Y por fin llego ese gran día, que a día de hoy seguimos disfrutando como el primer día. Gracias a todo el equipo de Duldi, que hace posible que podamos ofrecer todo lo necesario para llevar a cabo nuestro trabajo diario, en nuestro negocio.

Vivir lo vivimos muy bien la verdad. Es duro, porque trabajamos de lunes  a domingo, pero aprovechamos al máximo las horas libres ya que tenemos a mi niño, Adrián, y nos organizamos  como mejor podemos.

Las ganas e ilusión no se deben perder nunca, siempre nos levantamos con la meta de luchar al máximo y sacar lo mejor de nosotros.

Es muy difícil poder resumir en palabras lo vivido en 5 años ya que no acabaríamos ni en varios días (ríe).

Resumiendo, solo tengo buenas palabras y un perfecto trato en todo lo referente a mi franquicia la verdad. Problemas ninguno que en su momento no se haya podido solucionar.

¿Cuál es el día a día del negocio? ¿Qué sensaciones te genera estar al frente del mismo?

C: Mi día a día lo vivo muy feliz, agradeciendo lo que tengo que con mucho esfuerzo en su día me costó conseguir. Estar muy pendiente de mis golosinas, caramelos y escaparates, ya que no te puedes despistar con toda la competencia que siempre tenemos detrás. Aunque lo que si siempre tengo presente, es que si se preocupan en copiar o conseguir lo que yo hago es porque gusta y lo hago bien. Pero yo soy una persona muy agradecida y doy gracias que a día de hoy no he tenido un mes malo ni problemas de nada.

Me genera sensaciones de felicidad y satisfacción, de llegar a casa después de un duro y largo día de trabajo y ver que tienes cubiertas tus necesidades, gracias a tu trabajo y eso se refleja en nuestro día a día, sin lugar a duda.

¿Vives y trabajas en Sanlúcar de Barrameda. ¿Qué destacarías de esta zona y de tus clientes?

C: Pues nuestra es perfecta. Mis clientes son increíbles, incluso algunos son como de la familia. Un diario con los abuelitos para sus caramelos sin azúcar, que no me puede faltar ninguno, sino tenemos bronca (se ríe), los niños que me hacen sentir orgullosa cuando los escucho decir “mami yo quiero en Duldi”.

¡Bendito el día que decidí montar mi propio negocio con Duldi!

¿Qué supone para ti (ventajas o inconvenientes) trabajar con una empresa franquiciadora como Duldi?

C: Ventajas hay muchas ya que gracias a nuestro programa de novedades y surtido estamos informados de todo lo que está de moda en el mercado. Además, tener todos los productos centralizados en un mismo proveedor es una gran comodidad.

Inconvenientes solo encuentro el que por ejemplo en nuestra zona haya productos típicos en ciertas fiestas y yo no pueda tener dicho producto que mi competencia sí tiene. Mis clientes eso no lo entienden.

¿Cómo es el trato habitual que mantienes con la central de Duldi?

C: Ejemplar la verdad, el trato es como si fueran de la familia. Me escuchan y me ayudan en lo que necesite. Siempre tienen alternativas para solucionar lo que necesito.

¿Cómo ha evolucionado la tienda durante los más de 5 años que lleva abierta?

C: Yo nunca pensé que podríamos llegar a donde estamos y no es porque nos faltaran ganas, sino porque a día de hoy me parece increíble vender lo que vendemos y tener a tantísimos clientes “fieles”. Nos superamos siempre y cada día pensando en qué podemos hacer para satisfacer al cliente, que siempre te pide más y más.

Me faltan palabras para poder expresar lo feliz que me siento de poder llevar la vida que vivo con mi familia.

Para acabar, ¿qué consejo darías a una persona interesada en iniciarse en un negocio como Duldi?

C: Que tiren para adelante si verdaderamente están interesados, que es un negocio que tiene muchas salidas y que por experiencia propia es el dinero mejor invertido de mi vida, ya que nos ha abierto camino tanto a mi como a mi marido. Lo principal para mí, no solo ha sido poder montar mi negocio, sino contar con un equipo de profesionales como son todos los que forman Duldi. También les diría que no tengan miedo, que poco a poco, con esfuerzo todo se lleva y que en la vida hay que dar pasos importantes. Para mi Duldi es una empresa segura y de total confianza.

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